Ordenan desmantelar la cárcel de migrantes Alligator Alcatraz en Florida

La jueza federal Kathleen Williams, del Distrito Sur de Florida, ordenó el desmantelamiento del centro de detención migratorio Alligator Alcatraz, ubicado al oeste de Miami, y dio un plazo de 60 días para iniciar las acciones.

En su resolución, también prohibió el ingreso de nuevos migrantes al lugar, tras atender una demanda presentada por organizaciones ambientalistas y la tribu indígena Miccosukee, quienes denunciaron daños a la zona natural de los Everglades.

La orden establece que no podrá instalarse nueva infraestructura —como dormitorios, oficinas, pavimentación o cercado— en el terreno donde en julio de 2023 se habilitó el centro, sobre un aeropuerto abandonado tras una visita del entonces presidente Donald Trump. Asimismo, instruye a las autoridades a retirar instalaciones de gas, drenaje, desechos, iluminación industrial y cercos, para restituir el acceso al pueblo Miccosukee.

El centro, con capacidad para 2 mil personas y proyectado para ampliarse a 4 mil, había sido impulsado por el gobernador republicano Ron DeSantis. Actualmente aloja a 336 migrantes, una tercera parte de los que había semanas atrás, de acuerdo con el congresista demócrata Maxwell Frost, quien anticipó que el cierre era inminente.

“Esta es una victoria emblemática para los Everglades e incontables estadounidenses que creen que las especies en peligro deben protegerse, no explotarse”, celebró Eve Samples, directora de Friends of the Everglades, organización demandante junto al Center for Biological Diversity.

El fallo atiende principalmente argumentos ambientales, pues el centro se construyó en un área donde habitan 36 especies amenazadas, entre ellas la pantera de Florida, cigüeñas, caimanes y cocodrilos.

No obstante, existe otra demanda interpuesta por la ACLU en representación de migrantes, que denuncia violaciones a los derechos humanos en el lugar.

A pesar de la decisión judicial, se prevé que el litigio continúe. El gobernador DeSantis y el fiscal general de Florida, James Uthmeier, han cuestionado la legitimidad de la jueza Williams —nominada por el expresidente demócrata Barack Obama— y han prometido impugnar los fallos en contra de su administración.