Adolescentes hacen un esfuerzo para trabajar y continuar sus estudios

La secundaria número tres, se localiza en una zona rural muy cerca del sector vulnerable conocido como unidos avanzamos más; ahí algunos jovencitos tienen que hacer un esfuerzo doble para combinar sus estudios con el trabajo.

El profesor Joel Roque Lee, director de esta escuela secundaria, explica que actualmente un grupo de cinco o seis jovencitos, piden permiso para salir antes de que concluyan las clases diariamente, ya que tienen que ayudar a sus padres en la venta de artículos, de obreros o trabajos en el campo para poder contribuir en el gasto del hogar.

“Unos trabajan en la plomería, aunque están chiquitos ya tienen el cuerpo grandecitos, otros en el comercio informal y otros se nos van al campo; sube un poco en el tiempo de la pisca para ayudar en la casa porque algunos viven en hogares disfuncionales”.

Explica que esta dinámica, se incrementa, durante la temporada de cosecha de chile, cebolla, tomate, u otros productos.

Cómo Escuela lo permiten, la finalidad es ayudar a los jóvenes en esta necesidad que existe en sus hogares y al mismo tiempo motivarlos para que continúen sus estudios.

“Por decir cortan la jornada a las 11 porque tienen que ir a trabajar y nosotros les damos esa facilidad pero tienen que pegarse al maestro para que cumplan el plan vigente suficientemente para que acrediten, no regalamos calificaciones”.

Insiste en que la única condición es que se entreguen los trabajos que piden los profesores y sobre todo que no abandonen la escuela.